VERMÚ LITERARIO DE TRILCE

Cumpliendo con nuestro empeño de celebrar todos los días Trilce de cada mes un evento cultural, en este mes de octubre, hemos conseguido superar las adversidades y celebrar nuestro primer vermú literario bajo el tema genérico de “El vino”.

         Tuvo lugar en el Restaurante El Cenador del Hotel El Restón, allí nos acogieron con los brazos abiertos, como ya es habitual y gracias a su colaboración pudimos desarrollar un acto cultural ameno, divertido, innovador y participativo.

Abrió el acto el presidente de Trilce Isla Literaria, que además hizo de presentador del evento, dando las gracias al Cenador por permitir la celebración de nuestro primer vermú, a Sandra Castán, nuestra embajadora musical, por amenizar el acto con sus canciones de forma totalmente altruista y a pesar de tener un fin de semana repleto de actuaciones, a los miembros de Trilce por sus esfuerzos en escribir los mejores relatos y organizar los mejores actos culturales y a todos los presentes por su asistencia, ya que como dijo Ángel, sin ellos no sería posible este tipo de celebraciones.

         Leyeron sus relatos los miembros de la Asociación.

         Le tocó a Luis Renedo la labor más difícil, empezar las lecturas, y lo hizo de forma breve a la par que sutil y elegante con su relato-presentación-brindis, “El vino”.

         Continuó Vicente Vázquez que nos demostró que el relato, aunque no es su formato literario favorito, es una de sus especialidades menos explotadas y, lo hizo con un texto simpático y muy ameno al cual denominó “Dionisio y Paco”.

         Nos leyó Juan Escudero su obra “El último viaje”, un relato de misterio, sencillamente magistral, que nos mantuvo en vilo hasta el último sorbo y con el cual nos demostró que no solamente el baloncesto es su especialidad literaria, también lo es el relato de ficción.

         Llegó el momento de Mamen Manzano, nuestra solitaria y valiente corsaria y cuando todos esperábamos uno de sus poemas nos sorprendió con “Castilla”, un mágico sueño en el que nos recordó, entre susurros y taninos, que no hay límites en nuestros corazones.

         Empezó el turno de valientes voluntarios, Gema, que nos emocionó con su emoción y su emocionante trabajo manuscrito desde ese enorme corazón que posee. Tras ella Ángel Utrillas nos llevó de nuevo al Titanic de la mano de Lady, uno de los tres perros que sobrevivieron al naufragio.

         Elena tomó el relevo y recitó una poesía, un brindis, un conjuro que nos hechizo y nos hizo alzar las copas y nos elevó el ánimo al tiempo que nos arrancaba una sonrisa.

         Después leyeron sus relatos Raquel y María, bueno en principio lo leyó Raquel mientras María, trataba de encontrar el documento donde traía escrito el suyo. Al final apareció, estaba junto a una copa de vino, los dos relatos de estas dos grandes lectoras y escritoras causaron sensación entre los asistentes. Además de protagonizar una de las anécdotas divertidas del día.

         A parte de los miembros de Trilce Isla Literaria, como se puede apreciar, todos los lectores que participaron fueron lectoras. ¿Dónde estaban nuestros seguidores masculinos?

         Para terminar Ángel Utrillas nos llevó del vino al agua y leyó un relato, así titulado, de su libro “Recuerdos de lluvia y Cierzo”. El relato lo completó nuestra embajadora musical interpretando a continuación “María se bebe las calles”.

Sandra Castán intercaló su actuación musical entre las lecturas y de esa forma, además de demostrarnos que es una artista de primera fila y que posee una voz prodigiosa, nos llevó desde el Titanic con “My heart will go on” hasta “La noche es de los que se aman” pasando por otra “Noche de ronda” y sin olvidarse de presentarnos algunas canciones de su disco, “Thinking positive” y  “No limits”.

En definitiva, buena música, buena literatura, buen vino y unos amigos maravillosos que nos acompañaron, participaron y consiguieron que todos disfrutáramos de un vermú muy especial.

         Muchas gracias a todos por hacerlo posible.